Los lectores de «Para extender las alas» entenderéis, quizá, la deliciosa ambigüedad que supone dar nombre a este personaje de la novela, ilustrado por Mar Espinosa. Tanto es así que he decidido no revelar su identidad para que saquéis vuestras propias conclusiones. ¡Mil gracias por compartir tu hermosa visión conmigo, Mar!
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